La "incertidumbre" por la evolución de la Covid-19 y de las ventas de automóviles marca el regreso de los trabajadores.
Los duros recortes de Ford en Europa pintan de oscuro el porvenir de la factoría, pero está por ver el tono de gris. Con las furgonetas camino de Volkswagen y todos sus coches cuestionados menos el Kuga, el mejor escenario para la planta sería conservar de momento los actuales modelos -que garantizarían trabajo hasta 2021- y pelear por nuevos encargos cuando pase la tempestad